En el fútbol colombiano se preguntan los hinchas por qué delanteros como Jeffrey Díaz se empeñan en equivocarse, casi a propósito, frente al arco rival, a pesar de que su función es la de marcar goles. Pobre el guajiro atacante. No tiene la culpa de cargar, como todos nosotros, el ADN peninsular, que hace que los seres humanos beban licor en riñoneras y marren goles, ambas con gran éxito.
No es un mal originario de Camarones ese de botar goles imposibles de fallar. No tiene toda la culpa el buen Jeffrey. Más bien, Camarones, Tumaco, Buenaventura, Bogotá e Itsmina tienen el mismo problema: la sangre española que corre por las venas de los colombianos hace que la cobardía aparezca aunque no haya arquero frente al delantero.
Seguro que Díaz, al revisar su abolengo, seguro tiene un apellido Cardeñosa por ahí metido. Fijo es primo de Julio Cardeñosa, atacante de Betis y que pasó a la historia de los mundiales por hacer una jugada bien de Jeffrey durante el Mundial de 1978 y contra Brasil. Pero esta no es la única prueba que relaciona nuestra esterilidad de gol con la madre patria…
Válgame Dios, qué oso jajajajaja, no puede ser, ¿este futbolista fue malísimo? Qué forma de «controlar» el balón
La jugada que empieza en el segundo 47 de
http://www.youtube.com/watch?v=mUFh-PNO9As
me ha parecido bestiarista y guarda alguna relación con el efecto cardeñosa en Latinoamérica.
os van a llenar de ostias, tíos…Siempre los españacos dándose auto-bombo (y manolo también) ellos mismos para quedarse con la copa del mundo y al final salen de los mundiales por la puerta de atrás y por errores bien gilipollas
Como ya lo he manifestado antes, es absurdo que un equipo que no ha ganado nada en la Copa del Mundo de mayores aparezca siempre como favorito, pero cuya realidad es salir rapidito del torneo orbital. Me alegro por el triunfo de Helvetia, es empezar a poner a los ‘chapetones’ en su sitio.
Entre otras cosas, les cuento que acá en EUA los mexicanos están convencidos de algo similar, de tener con qué levantar la Copa (y eso por unos partidos de preparación al estilo de la selección Colombia de 1994), pero es un conjunto al que solo le alcanza para la Copa Oro y que nunca ha podido triunfar lejos de Centroamérica.