Profe, hay
situaciones tan sin sentido, sin lógica, tan descabelladas y que se deciden sin
tener en cuenta las consecuencias que puedan tener, que para el casual
aficionado, el humilde espectador, el distraído pero sentimental hincha,
resuenan en los más profundo del corazón con un interminable eco que lastima
hasta el hueso. En orden cronológico:
1. La decisión
de jugar un partido contra el Madrid
2. La decisión
de devolver estrellas
3. La decisión
de jugar la fecha regular sin el equipo A
Recuerdo
hace meses estar viendo “Gladiador” con Cabo, después vimos “La Pasión de
Cristo”, y más adelante vimos la serie “Roma”. Referencie las escenas más
sangrientas y dolorosas, donde espadas, puñales, látigos engallados con
espuelas penetraban la sudorosa piel del guerrero.
El
romanticismo de pensar que una época de hace 60 años donde Millonarios
representaba el nombre del buen futbol es un pensamiento ingenuo y tonto.
Enfrentar un equipo de titanes, de figuras como CR, Ozil, Benzema, que se
mueven entre las defensas de Piqués, Lucios, Pepes, y demás atletas de alta
estirpe, dentro y fuera de la cancha, no tiene sentido. Es como cuando a los 10
años yo me vestía con la camisa de Francia y simulaba discutir la estrategia
del partido en el camerino con Platini y Giresse, y después salía a la cancha
de la sala de la casa con una pelota de tennis a marcar goles apoteósicos
servidos por Rocheteau.
Lo de las
estrellas, pues le doy crédito al presidente de Millos por el simpático debate
que ha generado. Es un lindo episodio de nuestra inocencia y mala malicia
indígena, donde queda perfecto servirse un maíz pira y cerveza, quitarse los
zapatos, y desde la barrera ver como se desarrolla esta divina comedia.
Y por todas
estas cosas absurdas de nuestro perspicaces dirigentes, pusimos en riesgo la
punta de la tabla en la mejor campaña que Millos ha tenido despues del torneo
donde saco el ultimo narco-titulo.
Como diría
Walt Disney, El Circulo de la Vida, en su épica producción del Rey Leon.
Fiel Hincha Azul
Profe, hay
situaciones tan sin sentido, sin lógica, tan descabelladas y que se deciden sin
tener en cuenta las consecuencias que puedan tener, que para el casual
aficionado, el humilde espectador, el distraído pero sentimental hincha,
resuenan en los más profundo del corazón con un interminable eco que lastima
hasta el hueso. En orden cronológico:
1. La decisión
de jugar un partido contra el Madrid
2. La decisión
de devolver estrellas
3. La decisión
de jugar la fecha regular sin el equipo A
Recuerdo
hace meses estar viendo “Gladiador” con Cabo, después vimos “La Pasión de
Cristo”, y más adelante vimos la serie “Roma”. Referencie las escenas más
sangrientas y dolorosas, donde espadas, puñales, látigos engallados con
espuelas penetraban la sudorosa piel del guerrero.
El
romanticismo de pensar que una época de hace 60 años donde Millonarios
representaba el nombre del buen futbol es un pensamiento ingenuo y tonto.
Enfrentar un equipo de titanes, de figuras como CR, Ozil, Benzema, que se
mueven entre las defensas de Piqués, Lucios, Pepes, y demás atletas de alta
estirpe, dentro y fuera de la cancha, no tiene sentido. Es como cuando a los 10
años yo me vestía con la camisa de Francia y simulaba discutir la estrategia
del partido en el camerino con Platini y Giresse, y después salía a la cancha
de la sala de la casa con una pelota de tennis a marcar goles apoteósicos
servidos por Rocheteau.
Lo de las
estrellas, pues le doy crédito al presidente de Millos por el simpático debate
que ha generado. Es un lindo episodio de nuestra inocencia y mala malicia
indígena, donde queda perfecto servirse un maíz pira y cerveza, quitarse los
zapatos, y desde la barrera ver como se desarrolla esta divina comedia.
Y por todas
estas cosas absurdas de nuestro perspicaces dirigentes, pusimos en riesgo la
punta de la tabla en la mejor campaña que Millos ha tenido despues del torneo
donde saco el ultimo narco-titulo.
Como diría
Walt Disney, El Circulo de la Vida, en su épica producción del Rey Leon.
para cuando la lechoneada de millos?
Profe, hay
situaciones tan sin sentido, sin lógica, tan descabelladas y que se deciden sin
tener en cuenta las consecuencias que puedan tener, que para el casual
aficionado, el humilde espectador, el distraído pero sentimental hincha,
resuenan en los más profundo del corazón con un interminable eco que lastima
hasta el hueso. En orden cronológico:
1. La decisión
de jugar un partido contra el Madrid
2. La decisión
de devolver estrellas
3. La decisión
de jugar la fecha regular sin el equipo A
Recuerdo
hace meses estar viendo “Gladiador” con Cabo, después vimos “La Pasión de
Cristo”, y más adelante vimos la serie “Roma”. Referencie las escenas más
sangrientas y dolorosas, donde espadas, puñales, látigos engallados con
espuelas penetraban la sudorosa piel del guerrero.
El
romanticismo de pensar que una época de hace 60 años donde Millonarios
representaba el nombre del buen futbol es un pensamiento ingenuo y tonto.
Enfrentar un equipo de titanes, de figuras como CR, Ozil, Benzema, que se
mueven entre las defensas de Piqués, Lucios, Pepes, y demás atletas de alta
estirpe, dentro y fuera de la cancha, no tiene sentido. Es como cuando a los 10
años yo me vestía con la camisa de Francia y simulaba discutir la estrategia
del partido en el camerino con Platini y Giresse, y después salía a la cancha
de la sala de la casa con una pelota de tennis a marcar goles apoteósicos
servidos por Rocheteau.
Lo de las
estrellas, pues le doy crédito al presidente de Millos por el simpático debate
que ha generado. Es un lindo episodio de nuestra inocencia y mala malicia
indígena, donde queda perfecto servirse un maíz pira y cerveza, quitarse los
zapatos, y desde la barrera ver como se desarrolla esta divina comedia.
Y por todas
estas cosas absurdas de nuestro perspicaces dirigentes, pusimos en riesgo la
punta de la tabla en la mejor campaña que Millos ha tenido despues del torneo
donde saco el ultimo narco-titulo.
Como diría
Walt Disney, El Circulo de la Vida, en su épica producción del Rey Leon.
Fiel Hincha Azul
Profe, hay
situaciones tan sin sentido, sin lógica, tan descabelladas y que se deciden sin
tener en cuenta las consecuencias que puedan tener, que para el casual
aficionado, el humilde espectador, el distraído pero sentimental hincha,
resuenan en los más profundo del corazón con un interminable eco que lastima
hasta el hueso. En orden cronológico:
1. La decisión
de jugar un partido contra el Madrid
2. La decisión
de devolver estrellas
3. La decisión
de jugar la fecha regular sin el equipo A
Recuerdo
hace meses estar viendo “Gladiador” con Cabo, después vimos “La Pasión de
Cristo”, y más adelante vimos la serie “Roma”. Referencie las escenas más
sangrientas y dolorosas, donde espadas, puñales, látigos engallados con
espuelas penetraban la sudorosa piel del guerrero.
El
romanticismo de pensar que una época de hace 60 años donde Millonarios
representaba el nombre del buen futbol es un pensamiento ingenuo y tonto.
Enfrentar un equipo de titanes, de figuras como CR, Ozil, Benzema, que se
mueven entre las defensas de Piqués, Lucios, Pepes, y demás atletas de alta
estirpe, dentro y fuera de la cancha, no tiene sentido. Es como cuando a los 10
años yo me vestía con la camisa de Francia y simulaba discutir la estrategia
del partido en el camerino con Platini y Giresse, y después salía a la cancha
de la sala de la casa con una pelota de tennis a marcar goles apoteósicos
servidos por Rocheteau.
Lo de las
estrellas, pues le doy crédito al presidente de Millos por el simpático debate
que ha generado. Es un lindo episodio de nuestra inocencia y mala malicia
indígena, donde queda perfecto servirse un maíz pira y cerveza, quitarse los
zapatos, y desde la barrera ver como se desarrolla esta divina comedia.
Y por todas
estas cosas absurdas de nuestro perspicaces dirigentes, pusimos en riesgo la
punta de la tabla en la mejor campaña que Millos ha tenido despues del torneo
donde saco el ultimo narco-titulo.
Como diría
Walt Disney, El Circulo de la Vida, en su épica producción del Rey Leon.
Fiel Hincha Azul