
(Imagen cortesía de DiabloAmericano)
Mínimo como su apodo fue el cuarto de hora de Emner. Mínimas también han sido sus apariciones en buena parte de los clubes en los que ha militado. Su mínimo cuarto de hora tuvo lugar segundos después de que un rielazo de 30 metros suyo le diera el triunfo a un Millonarios ya clasificado contra un eliminado y alicaído Quindío en la última fecha de la fase regular del apertura 2003.
Antes de esta soleada tarde bogotana, este volante se las había arreglado para abrirse paso entre las piernas de los jóvenes valores compañeros suyos en la Sarmiento Lora, todos varias cabezas más altos que él, para debutar como profesional en 1996 con los colores de Cortuluá. Sin llegar nunca a jugar más de diez partidos por temporada, consecuente con su mote y su fisionomía, Emner permaneció en el equipo corazón hasta mediados de 2003 se le apareció la virgen encarnada en Norberto Peluffo quien decidió llevarlo a Millonarios para el primer semestre de 2003. De Tuluá partió con un sólo gol en su registro (lo consiguió en el 2000) y llegó a Bogotá para vivir el climax de su carrera y de paso, no podía ser de otra forma, jugar menos de diez partidos. De Millonarios fue licenciado junto con el «Gringo» Guiran (candi-da-ta-zo) terminado el primer semestre de 2003. Suponemos que el segundo semestre de ese año lo dedicó a celebrar su gol al Quindío en los más selectos salones de la capital pues no existen registros de su accionar sino hasta 2004 cuando reforzó al recien ascendido Chicó.
En el equipo de Pimentel disputó, no se sorprenda, un sólo partido y, fiel a la tendencia, salió licenciado para mediados de año para nuevamente no dejar huella de lo que pudo ser de él en el segundo semestre del año. En el 2005 bajó las escaleras y llegó al entonces próspero, hoy extinto, Pumas de Casanare. Allí rompió en dos su propia historia y disputó más de diez partidos en los que mostró las condiciones mínimas fijadas por el rutilante Bogotá F.C. para los aspirantes a reforzarlo. Así, regresó a Bogotá en el segundo semestre de 2006 y hasta hoy ha sabido mantenerse en la titular del antiguo Cóndor-Biogen junto a otros toros toreados en muchas plazas como John Mario Ramírez y Gustavo Quijano. .


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