De cuando Hamilton Ricard tuvo que reinventarse

Hasta que llegó el día en que todas las puertas de todos los equipos de todas las ligas del mundo se le cerraron al andariego y emprendedor Hamilton Ricard. El dueño del bar de un hostal bogotano quiso saldar cuentas con el chocoano y logró que su nombre fuera incluido en una circular roja que de forma conjunta elaboran la FIFA y Datacrédito.

Angustiado, el delantero y reconocido coleccionista de contratos a término fijo optó por pedir consejo. Algún compadre entonces le dijo: «reinvéntate, Hamilton, reinvéntate». Una lástima, como vemos, que el ingenio que le ha sobrado para hacerle el quite al desempleo le haya faltado a la hora de construir un nuevo perfil profesional.

3 Replies to “De cuando Hamilton Ricard tuvo que reinventarse”

Deja un comentario